jueves, 28 de enero de 2010

Carta que nunca se enviará (3)

Te vi… Y por los escasos 6 segundos que te vi pasar, pude sentirme como si tuviera pagada una vida de vacaciones “todo incluído” en el hotel mas lujoso del cielo.

Te vi y no pude notar esos kilitos de más que, según tú, tienes encima… sigues tan perfecta como el día en que te conocí, sólo que entre más pasa el tiempo, mas bonita te veo… más tú…

Te vi y ya no sentí ese miedo idiota que me daba al tenerte cerca… cuando no sabías que vivía aquí… cerquita de ti. Sabes? ahora que estoy mas cerca de mi mismo, del que toda la vida quise ser… aprendi (experimenté) y entendí que para dejar de ser esa caricatura en blanco y negro que fui y convertirme en la pintura surrealista que quiero ser… tengo (quiero) que estar cerca ti, de la banqueta que pisas, del aire que respiras…

Hablando sinceramente, (y sin ganas de que parezca monólogo y/o manual de un acosador) creo que para que el rompecabezas de mi alma esté completo, la pieza que sobra y al mismo tiempo la pieza que falta, eres tu…

Te vi llena de fuerza, de vida… de ganas de hacer las cosas que has venido buscando. Con las pilas necesarias que requiera el “sprint” que vas a hacer para alcanzar a tus sueños… y eso me hace muy feliz, soy inmensamente feliz sabiendote creciendo, mejorando, sonriendo…

Te vi… a 4 pasos de distancia…
pasaste por donde estaba yo, sentado, con un té de hierbabuena en la mesa.
Y a tu paso, me dejaste con la garganta hecha un nudo “Windsor”, con las rodillas temblando y con la panza como una red llena de mariposas.
Lo mas probable es que no te hayas dado cuenta siquiera de mi prescencia, pero aún asi, me gusta la idea de hacerme creer a mi mismo que si me viste… y que alentaste el paso, solamente para que yo pudiera verte mas tiempo…

1 comentario:

She, her. dijo...

Luisito

Sé que ya lo he dicho pero va de nuevo: te admiro por ser coherente con lo que piensas, quieres y haces.

La gota de agua perfora la roca no por la fuerza si no por la persistencia.